El hábitus es un concepto
central de la teoría del sociólogo historiador estructuralista Pierre Bourdieu,
quien define al hábitus como sistema de disposiciones socialmente constituidas
que, en cuanto a estructuras estructuradas y estructurantes, son el principio
generador y unificador del conjunto de las prácticas y de las ideologías
características de un grupo de agentes (Bourdieu, 2002: 107).
Se considera que en el hábitus
las personas van determinando u orientando sus identidades y sus prácticas de acuerdo al tipo de
estructura social en la que les ha tocado interactuar, además comparten un
entorno social diferenciado y tienden a compartir estilos de vida parecidos a lo
largo de su existencia. Es por esta razón que es diferente la subjetividad de cada individuo, porque parten de sus propias experiencias.
Para tener una mejor
comprensión del concepto “hábitus” se debe vincular los conceptos de campo y
agentes. Por campo se reconoce a los espacios sociales en donde las personas se
interrelacionan, se comunican, comparten y los agentes son los
sujetos que participan en este campo, entonces básicamente las personas al interactuar
habitualmente en su entorno social van desarrollando su comportamiento y su
accionar, por lo tanto se atribuye que las relaciones sociales cumplen un papel
fundamental en las prácticas sociales.
Al analizar esta premisa
teórica, se determina que las representaciones y las prácticas de las personas
dependen del entorno en que viven, entrelazado con lo que aprenden a lo largo
de su coexistencia, es decir sus actos tienen relación con las pautas, reglas y
condicionamientos que se han generado y se han socializado en su hábitat,
entonces el hábitus es el concepto que
Bourdieu propone para relacionar las fuerzas que poseen las disposiciones
subjetivas, las mismas que son el resultado de todo lo que han reproducido con el lenguaje.
Entonces la participación
del agente dentro del campo involucra dos planos bien definidos, que son lo
Objetivo y lo Subjetivo. El primero es la estructura que de antemano ya está
determinada, y el segundo es cómo el agente piensa, siente, actúa y se expresa
dentro de ese campo, por lo tanto el agente esta direccionado o reclutado a ser un sujeto
estandarizado en la medida en que se relaciona en este campo, es decir va
adoptando cualidades y responsabilidades acorde a su sexo..
El lenguaje se ha ido reconstruyendo
y desarrollando perpetuamente dentro del campo reproductor de discursos, estos han
sido seleccionados por los grupos dominantes, convirtiéndo al lenguaje en un medio eficaz
para que los agentes vayan acomodandose, exponiendo sus ideas y den significado a su vida de acuerdo al entorno
que les rodea, ya que el conocimiento del mundo está basado en la reproducción
de significados, acuerdos, normas, divergencias e incluso códigos, que se reconocen a
través del lenguaje.
El sociólogo Gilbert
Giménez se refiere al campo como
"una esfera de la vida social que se ha ido autonomizando progresivamente
a través de la historia en torno a cierto tipo de relaciones sociales, de
intereses y de recursos propios, diferentes a los de otros campos"(Giménez,
2002: 6). En este pensamiento se destaca la manera compleja en que la sociedad
ha ido evolucionando y seguramente acompañada con la persistente reproducción
de un lenguaje donde está presente el androcentrismo.
El tema del androcéntrismo también opaca el mejor desarrollo del lenguaje en la humanidad, eso lo analizaremos en otro bog.